Todos amamos nuestra figura y
la cuidamos con mucho esmero a pesar de que solo es un modelo, una imagen, un
lugar donde se guarda un alma que no
conocemos; ninguno reparamos en que el
alma, es lo más valioso que tenemos, pero como no la vemos, no la valoramos;
hay que ver para creer, dijo Santo Tomás, y fue recriminado por Jesús; pero
nosotros seguimos olvidando que nuestra figura es solo una caja donde guardamos
nuestro tesoro que no vemos; tampoco
vemos nuestra voz y la escuchamos y obedecemos, ¿por qué no escuchamos también
esa voz que nos dice que también somos pensamiento que no vemos, que lo que
llevamos dentro es mucho más valioso que esa imagen que nos da un espejo.
Pensemos que somos mucho más
que la imagen de nuestro cuerpo.
Jecego. Jueves 07 de Junio
del 18.
No hay comentarios:
Publicar un comentario