Que
enorme es el amor.
De frágil estructura es tu
masa
sin embargo, llegas donde
nada puede,
invisibles son tus paredes de
rosa temprana
y tus sentires sublimes como
magia blanca.
Siento
tu silencioso gemido en mi pecho
cuando mi sueño te abraza,
y se desplaza mi mano de seda
sobre tu cálida piel que me
abrasa;
siento tu fuego en mi agitada
sangre
circulando por todo mi
cuerpo,
siento el perfume de tu
aliento
en los rincones más oscuros
de mi carne.
Siento temblar mi cuerpo, y
no es de frío,
siento que tú me empujas, y
no es desprecio,
siento que tu calor me
abrasa, y no es incendio,
y te siento como siente la
montaña
cuando llega al cielo, su
peso;
siento tu estructura de seda
acariciándome
y tus besos pedidos en mi
carne;
siento lo que la montaña siente
cuando llega al cielo; tu
aire…..
Jecego. 22 de marzo del 18.
No hay comentarios:
Publicar un comentario