Mi pecho se rompe como frágil
lancha
en la marejada de tu
viento;mientras la suave melodía de tus palabras
se hace música silente de tus labios,
y se compone la poesía más hermosa,
quemando el aire que respirabas,
en el incendio de tu voz
que se hizo torbellino y quemó tu página.
Del humo salieron las
palabras
que se hicieron poesía; las paredes se llenaron de letras
y de la nada salió la voz del poeta
que leyó en el aire su poesía
sin escribirla como pensaba.
Solo tuvo que cerrar los
ojos
y mirar a la pared blanca,
que antes estaba vacía
y enhebrar las palabras
que se formaban en el humo
que movía el aire…..
Jecego. 01/06/17.
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