Despedida a la noche.
Canto a un nuevo día
en la magnitud del tiempo,
cuando en el horizonte, raya
la aurora
y mis ojos se agrandan para
verla,
y se libra de sus párpados
dando entrada a mis palabras
de alabanzas al cielo,
por romper la noche y su
sueño
con el regalo de la mañana.
Se fue la noche con mi mundo
entero
y llegó la mañana para
aliviar mi sueño
con la luz de tus ojos, y el
sabor de tus besos;
que bonito es amarte,
querida, que bonito
sabiendo que solo podemos
verlos nosotros
desde lo alto, como los
albatros, desde el cielo.
Jecego. Miércoles 15 de junio
del 16.
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