Vi una estrella al amanecer.

Y las nubes festejando su presencia
en el horizonte todas bailaban,
vestidas con trajes de colores
y música celestial en esencia;

esos ángeles siempre silentes
hoy, alborozados cantaban,
desgranando su propio ser en palabras
con la estrella de la mañana

Mientras, Venus somnolienta
se disipaba en el azul celeste,
emocionada por el baile de las nubes
que le despedían con sus vestido de gala;

hizo presencia la noche en el cielo
en espera que llegue la mañana,
y regrese Venus de su viaje sideral
con las rojas nubes del alba.

Y empezará un nuevo día en la tierra
sin luna y sin estrellas,
escondidas detrás del sol
en espera que la noche aparezca;

porque ellas son la luz del marino,
del enamorado, y del pueblo,
y nos obliga a mirar al cielo
cuando la luz se viste de negro.

Vi una estrella al amanecer
despojándose de la noche pasada,
vistiendo su blanco traje de luces
que el viejo sol le regala.

Jecego.

2 comentarios:

Pluma Roja dijo...

Bello cielo despejado que permite observar a Venus y sus vecinas.

Hermoso poema querido Jecego, toda poesía.

Saludos.

Katy dijo...

Que hermosa dedicatoria al lucero de la mañana con nombre de mujer que
brilla con luz propia.
Bss y feliz semana