La voz se hizo eco.

La voz se hizo eco.



Cuando el mundo se llenó de palabras
la voz se hizo eco de sí misma,
y pobló la tierra de sonidos con nombres,
de colores, de cosas de amor y vida.


La palabra es el aire que llena la tierra
dando nombre a las cosa que la llenan,
es el principio y fin de la vida
y a veces las cosas mismas.


Hasta el silencio se hizo con palabras,
la noche, está hecha de silencios,
que repetidos muchas veces, su eco,
llena a la tierra de fantasmas y miedos.


Porque son fantasmas las palabras,
que sin ser vistas, hablan siempre,
dicen lo que quieren, cuando quieren
sin ocupar espacio en la nada.


Aunque el silencio también es vida
cuando hablan en silencio los ojos,
porque al faltar la palabra que diga
ya no se oye el doblar de su eco.


Las cosas toman vida y hablan
cuando se convierten en palabras,
dejando de sufrir de pena, escondidas,
en el abismo de la garganta;


esperando que escape la voz
que les de vida y salgan,
porque solo la voz rompe el silencio
recogido en las palabras.


Jecego.


La voz es la dueña del mundo, que se pobló de palabras.
El mundo sin palabras, sería nada.



4 comentarios:

She dijo...

Olá! Seu post está maravilhoso, amei o poema! Realmente as palavras são poderosas, mas o silêncio vem carregado de palavras disfarçadas em silêncio. Parabéns pelo post! Passo também para te convidar a ler e contribuir com mais um capítulo de nossa aventura em meu blog...hehe
Beijinhos, Cantinho She.

vuelo de hada... dijo...

Ay pero belleza de versos:
esperando que escape la voz
que les de vida y salgan,
porque solo la voz rompe el silencio
recogido en las palabras.
Un final con estocada!
Un abrazo amigo cada vez mas refugiada en tu poesía.

Unknown dijo...

Vuelo de hada; gracias por tus palabras, que me dan animos para escribir más cada día. Yo no tengo idea de poesía, pero me encantan y escribo todos los ratos que tengo libres, que no son muchos y como mi fuente soy yo mismo, tomo retales de mi vida y los escribo y con ello hago feliz a alguien, mucho mejor.
Un abrazo.
Jecego

Pluma Roja dijo...

Siempre he dicho que la palabra es la única arma que nos puede dar libertad. Coincido contigo.

Me encantó tu poema.

Un saludo Cordial, amigo

Hasta pronto.