Todos los ojos no ven lo mismo

Todos los ojos no ven lo mismo.

Un señor fue a un mercado y se acercó a un puesto donde una señora vestida de negro, vendía rosas de muchos colores, además de blancas y rojas.

Durante toda la mañana vendía y vendía, no paraba de vender rosas.
Por sus encallecidas manos pasaron cientos de ramos de rosas, de colores: azules, rosas, amarillas, blancas y rojas....

Al medio día se habian acabado los manojos, los cubos estaban vacíos, pero los ojos de aquel señor seguían viendo rosas, él sentía su calor, percibía su perfume, aunque la voz que decía gracias, ya no se oía; entonces dicho señor se dio cuenta que estaba solo en aquel lugar, donde la señora de negro estaba recogiendo sus matules porque se iba.

Entonces se dió cuenta de la influencia de los colores en las personas y dijo:

















Todas las rosas son hermosas
pero entre todas ellas,
la más hermosa y bella,
la más grácil y primorosa,
no es la rosa blanca o roja
sino la negra rosa.

Sin embargo se las llevaron todas
menos aquella,
la de petalos negros
la más bella de las rosas,
que no se había vendido...
y se quedó en el mercado,  sola.

Jecego.

3 comentarios:

aydhe ilusion dijo...

=O

que bello escrito
convertido en poema
qe llego por mis labios
hasta mi corazon...

un placer haber
pasado por este
su blog

SE EQUIVOCARME SOLO dijo...

aydhe ilusión, gracias.
He sentido una enorme alegría al encontrarme por primera vez, un comentario, que además de hermoso es ilusionante, como tu nombre.
Espero encontrarnos en nuestros andares, en más ocasiones.
Ahora iré a buscar tu blog.
Gracias.
Jecego.

SE EQUIVOCARME SOLO dijo...

aydhe ilusión.

Acabo de ver la lista de blogs que sigues y son muchos, pero mis ojos se posaron en el mio, por ser la primera vez que ocupa un espacio en largas listas de blogs que he leido.
En primer lugar te diré que tengo 78 años, casado, con una señora encantadora, refunfuñona como toda; tengo dos hijos, dos nueras, cuatro nietos (tres hembras y un barón. Estoy jubilado y me entretengo escribiendo cositas.
Mi profesión fué enfermería y ahora descanso.

Permiteme que por mi edad te trate como nieta. (mi nieta ilusión)

Jecego.