Buenos días, Día,
te buscaba en la noche de mis sueños;
te he encontrado plácido en la aurora
de este amanecer,
y vas creciendo a la par de las horas
en mi ser, grande como el día que eres.
Gracias Dios, por dejármelo ver.
Jecego. Jueves 02 de junio del 16.
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