Mañana será diferente, espero.
12 de diciembre del 14.
Estoy destrenzando el ovillo de
la noche
en lo más profundo de un sueño helado,
el día se está volviendo gris
y el aire, frío insoportable
que barrunta lluvia, con olor a
Teide.
Mientras, tú me miras callada
cuentas
las hebras que he desenrollado
del ovillo ,
porque quieres hacerme con las hebras
un chaleco que me cubra del
frío y la lluvia
con tus manos y el cálido aliento de tus labios.
Al final de la noche el alba se
asoma
entre las hebras que he sacado
del ovillo,
y se cuelgan las nubes que no
quieren separarse
de sus cálidas manos cubiertas
de lágrimas
que forman parte del chaleco
que ella me hizo.
Miré el chaleco cubierto de lágrimas
como perlas
hecho con aquellas hebras que
había desenredado,
que brillaba como estrellas en un cielo de verano,
y me guiñaban sus ojos, y cantaba, una canción triste
de despedida con el abrazo
helado de un cuerpo cansado..
Jecego.
4 comentarios:
¡Hola Isidro!!!
Creo que ese chaleco te quedó precioso. Nos dejas un poema muy lindo mirando las estrellas en un cielo de verano.
Como siempre, exquisito.
¡Es un placer leerte! Pero, también quiero desearte unas muy felices fiestas navideñas y un próspero año nuevo.
Que todos tus sueños se hagan realidad, tanto como para mí deseo.
Te dejo un fuerte abrazo y toda mi estima.
Gracias por darnos tanto y tan bello.
Besos azules en vuelo.
No estés triste, la Navidad es fuente de alegría, y aún en los peores momentos, una centella de luz iluminará tu camino para ser feliz.
Cuídate; y gracias por tu comentario y ser mi amiga. ¿Te gusta la bicicleta? , yo fui un trabajador con ese útil. Un abrazo. Jecego.
A veces vamos desenredando ovillos de recuerdos y sentimientos que llevamos dentro del alma.
Besos
Amiga Ilesin, un abrazo cargado con la luz de una Navidad entera. Felices días y que Dios te acompañe. Un abrazo. Isidro-Jesús.
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