Sonrisa.

Voz amable y cariñosa, sin sonido,
que llega mas allá, que la palabra dicha;
que habla sin decir nada, en silencio,
donde son los labios, quienes hablan;

haciendo que traduzca el pensamiento
aquella imagen sin palabras,
que da fe de que es cierto,
de que:  una sonrisa sola, habla..

Cuando se extienden los labios
para que la felicidad salga,
brota una imagen que llega
donde no pueden las palabras;

el mundo se hace un río
de sentimientos como agua,
que llenan el espacio que espera
que broten las palabras;

que quedan presas en silencio
porque la sonrisa no habla,
pero dicen lo que quieren
solo con mirar a la cara.

Jecego.

Multitud.

Cuando la sala se llena de gente
se ocupa su espacio con palabras,
incomprensibles como ruidos
que no se entiende lo que hablan;
porque se unen unas a otras
y pierden nitidez y escapan,
de aquella cárcel que rompe su seña
con alborotos de palabras,
donde han perdido la esperanza
de ser útiles cuando hablan. 

1 comentario:

Marinel dijo...

Hablar en la justa medida,sin apremios o incordios,suavemente,inteligiblemente,casi a veces,mejor no hablar y con sólo gestos,decir mucho más que con las palabras.
Besos.